La carrera tercera de la ciudad de Ibagué, es el punto de encuentro de sus pobladores, la carrera histórica, pero también la carrera de los luchadores del rebusque, el centro de intercambio e igualmente conocida como la calle del comercio para la ciudad a partir del siglo XX.
Luego de determinados sucesos, como la construcción de la Escuela Normal Superior de varones en 1985, la cual hizo que la mirada de los Ibaguereños se centrara más en la tercera; esta escuela estaba ubicada en la Calle 14 con Carrera tercera.
También, uno de los aspectos más importantes según Hernando Bonilla historiador en la ciudad, es la llegada del tren a la ciudad de Ibagué, en el año 1921, la construcción del primer teatro, inicialmente conocido como el Teatro Torres, posteriormente como el Teatro Departamental y que actualmente conocemos como el Teatro Tolima con capacidad de albergar hasta 1000 espectadores.
La construcción de la primera plaza de mercado y diversos hoteles por caracterizarse por ser ciudad de paso hacía el centro y occidente del país; también muchas casonas fueron demolidas para dar paso a la plazoleta Darío Echandía, inaugurada el 29 de mayo de 1992.
Otro emblemático sitio de encuentro que desapareció fue el café Niza, que es lo que hoy conocemos como Bancolombia ubicado en la Carrera tercera con Calle 11, así mismo la plazoleta de Santo Domingo, posteriormente conocida como la plazoleta del colegio de San Simón, lo que hoy en día conocemos con el nombre de parque Murillo Toro.
Igualmente la plaza de Bolívar que tuvo una transformación importante en los años 1910 a 1918, pasando de ser una Plaza de Ferias a convertirse en un parque de recreo más agradable, incluyendo la siembra de árboles.
Sin embargo, hoy la emblemática carrera tercera está adornada no solo con las nuevas construcciones, también con la alegría que le impregnan los músicos, artistas, vendedores ambulantes, estatuas humanas y mimos a lo largo y ancho de esta vía, en cada esquina desde la calle 10 hasta la 15, que es su vía peatonal.
“Yo recuerdo que el único vendedor informal que se veía en la Carrera tercera era don Moisés el señor que vendía maní” afirma Hernando Bonilla, historiador de la Academia de Historia del Tolima. En la actualidad es común encontrar desde la señora que vende dulces y minutos hasta el músico que se sienta con su guitarra eléctrica a tocar melodías tan complejas y conocidas como lo es Bohemian Rhapsody, canción legendaria de la banda Queen.
La variedad que existe en la tercera como oferta para los transeúntes ha sido lo que ha mantenido de pie el comercio en esta zona, perteneciente al centro de la ciudad, ya que se encuentra ropa, comida, utensilios para el hogar entre muchas otras cosas que la hacen concurrida.
Por otro lado, existe la oferta cultural que va ligada también al comercio, donde artistas musicales, pintores se estacionan a diario en puntos estratégicos para ellos, donde la gente que transita pueda deleitarse con su talento y a la vez comprar piezas de arte, además el pertenecer al centro de la ciudad, donde se sitúa la parte gubernamental, los bancos, el palacio de justicia, el teatro entre otros, siendo un sitio de paso obligado por los habitantes y turistas.
La Alcaldía de Ibagué le apuesta a no dejar desaparecer la Carrera tercera como el lugar para mostrar a sus visitantes y pobladores, afirma Fernando Marín, pintor que trabaja hace aproximadamente 30 años sobre esta carrera como comerciante informal y beneficiario de los apoyos de la Alcaldía desde hace 5 años. Desde los últimos años y con la peatonalización de la misma se han visto beneficiados él y más artistas, ya que reciben más atención y respeto de los transeúntes: antes no podían estacionarse a mirar como él pintaba con espátulas y esponjas sus obras de arte, paisajes coloridos y realistas que se encuentran tendidos en el suelo.
La peatonalización de la carrera tercera que se llevó a cabo bajo el gobierno de Jorge Tulio Rodríguez en el año 2003 y ha sido sin duda un hecho que marcó el progreso de la capital musical, y dio la oportunidad a la ciudadanía de tener nuevas experiencias culturales y comerciales que hoy en día permanecen.
